Vivimos en Chile, quizás uno de los países más “parrilleros” que existen. Prendemos la parrilla para los cumpleaños, para el año nuevo, para los partidos de fútbol y la infaltable temporada de parrillas domingueras que se inician con bombos y platillos en nuestras fiestas patrias, dando al mimos tiempo la bienvenida a la bendita primavera que permite aprovechar el buen clima para tirar un buen lomo, entrañas, longanizas de Chillán y una serie de diversos y sabrosos interiores.
Al 2009, Chile tenía un consumo per cápita de 81,3 Kg de carne ( Fuente: ODEPA), una cifra muy alta y similar a la de los países desarrollados, en contraste con los países en desarrollo, donde el promedio alcanzaba los 33 Kg per cápita. Dado el crecimiento económico que ha tenido este país en los últimos años junto con los buenos resultados que ha tenido nuestra selección de fútbol, probablemente esta cifra siga en aumento.