Estamos acostumbrados a escuchar término como “eco-friendly” o “comercio justo” en productos que consumimos. Sabemos que este término implica muchas cosas, dentro de las que se encuentran por ejemplo el respeto a las personas (trabajadores) y sus condiciones laborales mínimas, la huella de carbono de los productos, su huella de agua, la energía utilizada, si es o no orgánico, hecho de semillas genéticamente modificadas, etc.
Pero el término “predator friendly” no es tan conocido. Pero si lo piensan es bastante lógico.
El hombre a través de los años ha cercado grandes terrenos, parcelado las tierras, y la industria ganadera ha crecido. Esto ha hecho que las cadena tróficas se alteren, precisamente dañando sobretodos a los grandes predadores, que se han visto sin territorios de caza, y cada vez con menos presas… Lo que lógicamente ha llevado a que vuelquen su atención al ganado encerrado… presas fáciles. Lamentablemente esto afecta a granjeros de todo el mundo, llevándoles pérdidas millonarias anuales por la pérdida de animales (por ejemplo en la industria de la lana, lobos alimentándose de ovejas en américa del norte). Esta situación ha llegado al extremo que para manejar el problema, simplemente se está matando a los predadores.
De aquí que han nacido asociaciones que incluso certifican como “predator friendly a las empresas que dentro de sus políticas de control de predadores se encuentren modalidades no letales para éstos, como cercos eléctricos, o perros guardianes. Además existen instituciones que compran tierras para dejar cordones de terrenos grandes para la vida de estos animales. Una buena forma de preservar la vida salvaje (que queda) e intentar convivir en paz y mantener el balance natural de la vida.
Publicado en popap.cl
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