La temática Medio Ambiente, hoy en día ha abarcado todas las aristas con respecto a contaminación/descontaminación de nuestro medio habitable. De esta manera, el tratamientos de agua (TA), uno de los recursos naturales y fundamentales para la existencia de la vida, ha tomado importancia dentro de los últimos años,, incrementando su legislación y por ende el cumplimiento de está en nuestro país.
El tratamiento de agua es un conjunto de sistemas en cadena que permite la remoción de los contaminantes y material indeseado de las aguas residuales.
La agrupación de sistemas de tratamiento es una combinación de operaciones y procesos unitarios para la eliminación de los contaminantes.
Las operaciones unitarias son aquellas en las que predominan los fenómenos físicos, mientras que los procesos unitarios, predomina la remoción de contaminantes en base a procesos químicos y biológicos.
En la actualidad, las operaciones y procesos unitarios se agrupan entre sí para constituir los así llamados pretratamiento, tratamiento primario, secundario y terciario.
El tratamiento de las aguas servidas se ha incrementado en el país sustancialmente en los últimos años, alcanzando un nivel de cobertura cercano al 83% respecto a la población urbana nacional, lo cual ha posibilitado paulatinamente la descontaminación de los cursos de aguas superficiales y marítimos. De acuerdo a las atribuciones legales y fiscalizadoras, a la SISS le corresponde velar porque la operación de las Plantas de Tratamiento de Aguas Servidas (PTAS) se efectúe de acuerdo a la normativa vigente, a través de las acciones de fiscalización sobre el autocontrol, la realización de controles directos e inspecciones en terreno(SISS, 2012).
En el país, existen más de 260 sistemas de tratamientos de aguas servidas operando y autorizados por la Superintendencia, los que atienden a más de once millones y medio de habitantes de todo el País (SISS, 2012).
Los plantas para el tratamiento de guas pueden separarse en tres grandes grupos:
- Plantas para tratamiento de aguas residuales domesticas (PTAR)
- Plantas para el tratamiento de residuos líquidos industriales (PTRILes) y/o
- Plantas para la potabilización del agua.
La diferencia básicamente entre las plantas de potabilización del agua con las otras, es que en la potabilización solo se utilizan procesos fisicoquímicos y no la combinación completa de procesos físicos, biológicos y químicos.
El esquema básico de la estructura en cadena de una planta de tratamiento de aguas residuales es la siguiente:
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EDAR, estación depuradora de riles o comúnmente llamadas Plantas de tratamiento de riles |
En el proceso de tratamiento se generan un clarificado o agua tratada y un residuo llamado LODO o FANGO, el cual debe ser tratado en una línea de diferente denominadas Tratamiento de Lodos.
En el tratamiento de lodos es necesario por la normativa vigente para este residuo y su disposición final solida casi siempre es en rellenos sanitarios.
El clarificado o agua tratada puede disponerse en cursos superficiales, subterráneos o al alcantarillados siempre y cuando se cumplan los decretos supremos que rigen estos procesos.
En la actualidad existen muchos tipos de procesos de tratamientos de aguas diferenciados básicamente en su tratamiento secundario o biológico.
El tratamiento biológico puede ser aeróbico (existencia de oxígeno disuelto) o anaeróbico (inexistencia de oxígeno disuelto) donde la tecnología de tratamiento predominante corresponde a Lodos Activados (aeróbico) con casi un 60% respecto al número de PTAS (SISS, 2012).
Por Diego Hernández - Ingeniero Ambiental, de la Universidad Andrés Bello, especialista en plantas de tratamientos de agua, actualmente trabaja en EcoRiles en al elaboración y propuestas de una planta de tratamiento de riles.
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