23 de mayo de 2010

Reciclar Materia Orgánica

Se llama materia orgánica a los compuestos que forman parte de seres vivos, ya sea de productos de origen animal y vegetal. La materia orgánica se descompone por vía aeróbica o por vía anaeróbica.
Llamamos "compostaje", al ciclo aeróbico (con alta presencia de oxígeno) de descomposición de la materia orgánica. Llamamos "metanización" al ciclo anaeróbico (con nula o muy poca presencia de oxígeno) de descomposición de la materia orgánica.El metano, un gas que atrapa la energía solar y provoca junto con otros gases el aumento de la temperatura global. Una molécula de metano absorbe veinte veces más calor que una molécula de CO2.

¿Cómo podemos reciclar materia orgánica?


El Compostaje es la descomposición controlada de materiales orgánicos. El proceso de obtención del compost consiste en agregar en una pila los distintos materiales orgánicos, añadiendo agua y revolviendo para favorecer el ciclo aeróbico. Después de 1 a 4 meses se convertirá en "humus", que corresponde al "grado superior" de descomposición de la materia orgánica. El humus supera al compost en cuanto abono. Sus componentes aportan a la tierra los nutrientes que las plantas necesitan, permiten mejorar su estructura e impide la erosión.

El compost:
Mejora las propiedades físicas del suelo: La materia orgánica favorece la estabilidad de la estructura de los agregados del suelo, aumenta la porosidad, permeabilidad y la capacidad de retención de agua, obteniendo suelos más esponjosos.
Mejora las propiedades químicas del suelo: Aumenta el contenido de micro y macro nutrientes, la capacidad de intercambio catiónico y es fuente y almacén de nutrientes para los cultivos.
Aumenta la actividad biológica del suelo: Actúa como soporte y alimento de los microorganismos que viven en el suelo y contribuyen a la mineralización. La población microbiana es un indicador de la fertilidad del suelo.

Los materiales que se puede compostar son: restos de frutas y verduras, cáscaras de huevo, restos de café, cenizas, aserrín, paja, trozos de madera, poda del jardín, como el césped, ramas, hojas, raíces, pétalos, etc. Mientras que los materiales que no pueden ser compostados son: el aceite, comida muy grasosa, restos de carne, elementos inorgánicos como plástico, vidrio, papel o aluminio.

Los datos recogidos en los diversos proyectos de compostaje domiciliario puestos en marcha durante los últimos años, muestran que la reducción real de los residuos es al menos de 50%. La implementación masiva de proyectos de esta naturaleza, generaría un ahorro significativo.

Se puede encontrar en el sitio de la CONAMA el MANUAL DEL COMPOSTAJE CASERO

Camila

1 comentario:

Anónimo dijo...

buena información gracias..!!!

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