Soy Concejal de Vitacura por el partido Renovación Nacional, me he preocupado mucho en mi gestión de estar en terreno, conocer las diversas instituciones territoriales (juntas de Vecinos) y funcionales de la Comuna. Mi trabajo ha sido como Presidente de la Comisión de Alcoholes, para la entrega de patentes y escuchar a los vecinos que se oponen al funcionamiento de algún local, debido a las externalidades negativas que se producen. He sido un gran impulsor de las políticas verdes que ha liderado el Alcalde Torrealba, relativas a reciclaje, borrar la huella de carbono, construcción de Parques y un desarrollo más sustentable y amigable con la ciudad. Asimismo, soy director del Parque Botánico “el Chagual”, único Jardín botánico de Santiago, con el cual hemos luchado contra la corriente, que aún no toma en serio la importancia de mantener flora nativa y del desarrollo de un proyecto que no sólo beneficia a los vecinos y a la ciudad, sino que además a todo Chile.
¿Cuál es tu visión del reciclaje en Chile?
En Chile y en mi comuna es auspiciosa, en el sentido que tenemos el centro de reciclaje más moderno de Sudamérica (Punto Limpio), donde cada año que pasa, va más gente a reciclar sus producto, y no solo de la comuna, llegando a generar una cultura del reciclaje, lo que implica tomar conciencia que no podemos seguir contaminando indiscriminadamente, sino que hay que hacerse cargo de nuestros desperdicios y con ello del ambiente que nos rodea. Este año pondremos tres mini Puntos Limpios, con el fin de incentivar el reciclaje en diversos puntos de la comuna. Asimismo, tenemos un plan de desarrollo, que tiene por objeto reciclar directamente desde los hogares, el cual se podría implementar a partir del próximo año. Ya lo hacemos con Santa María de Manquehue y Lo Curro, pero la idea es aplicarlo en toda la comuna. Con relación al futuro, es difícil mantener estos programas sin la participación directa del Estado, es por ello que junto al Diputado Cristian Monckeberg y el Senador Antonio Horvath hemos tratado de ayudar y facilitar la existencia de una norma general, sobre la base de los incentivos, más que de castigos, para que se genere un marco para reciclar en todas parte de Chile, y que el Estado se haga cargo de algunos costos, con el fin de hacerlo atractivo para que inviertan los particulares. Si no es así, sólo algunos municipios podremos seguir sustentando esta clase de programas, ya que por su implementación son muy caros.
¿Qué le falta a Chile para ser un país con conciencia medioambiental?