27 de marzo de 2011

Agenda 21. Compromiso local para impulsar el Desarrollo Sostenible

La Agenda 21 es un Plan de Acción que los Estados deberían implantar con la finalidad de transformar el modelo de desarrollo actual, basado en una explotación ilimitada de los recursos naturales, en un nuevo modelo de desarrollo basado en los valores de la sostenibilidad, que satisfaga las necesidades de las generaciones actuales sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras.

agenda 21

Haciendo un poco de historia, en 1992 el concepto de Desarrollo Sostenible es relanzado en la Conferencia de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente y Desarrollo celebrada en Río de Janeiro, Brasil, conocida como Cumbre de la Tierra.

En esa conferencia más de 150 Estados, entre ellos Venezuela, suscribieron el programa de acción para el Siglo 21, conocido como AGENDA 21. Tanto los actores territoriales (gobiernos a todos los niveles) las ONG’s y las empresas fueron invitadas a diseñar sus propias agendas 21, porque según las Naciones Unidas estos son los actores cotidianos del Desarrollo Sostenible.

El punto de partida de la Agenda 21 es la Carta de la Tierra. Esta es un documento que establece los principios para una forma de vida sostenible, como fundamento común mediante el cual se deberá guiar y valorar la conducta de las personas, organizaciones, empresas, gobiernos e instituciones transnacionales. Los principios en que se basa son los siguientes: respeto y cuidado de la comunidad de vida; integridad ecológica; justicia social y económica; democracia, no violencia y paz.

La Agenda 21 puede definirse como un gran “contenedor” de iniciativas programáticas articuladas para que gobiernos, empresas u organizaciones de la sociedad civil puedan emprender acciones a favor del Desarrollo Sostenible.

En 1994 dos años después de la cumbre de la Tierra, autoridades locales europeas y representantes públicos y privados se reunieron en la ciudad danesa de Aalborg para impulsar el proceso de Agenda 21 con motivo de la primera Conferencia Europea de Ciudades y Pueblos Sostenibles. De este encuentro surgió la Carta de Ciudades y Villas Europeas hacia la Sostenibilidad –la Carta de Aalborg- , un documento mediante el cual las ciudades europeas se comprometían a participar en las iniciativas locales de la Agenda 21 –la Agenda 21 local-, y a desarrollar programas a largo plazo que permitan avanzar hacia la sostenibilidad urbana.

Posteriormente, en Lisboa y Hannover, en los años 1996 y 2000 respectivamente, y también Estambul, donde se celebró en el año 1996 la Conferencia sobre los Asentamientos Humanos Hábitat II, tomó el relevo de Aalborg para avanzar en el desarrollo de nuevas estrategias para la aplicación de los principios de la sostenibilidad en los sistemas urbanos. En la cumbre de Desarrollo Sostenible celebrada en Johannesburgo en el año 2002 se pudo comprobar la importancia del papel que juega el mundo local: se calcula que hoy más de 6.400 ciudades y pueblos de 113 países han iniciado procesos de Agenda 21.

La Agenda 21 Local es un modelo de diagnóstico y formulación de políticas municipales orientadas a la sostenibilidad. Su propósito es evaluar el estado ambiental, social y económico de un municipio con el fin de iniciar, con la participación de todos aquellos que integran la comunidad, un proceso abierto, creativo y gradual de cambio hacia un modelo sostenible que permita encontrar la dimensión óptima de la ciudad.

Para ayudar a la formulación de un Programa o Agenda 21 local el Observatorio de la Sostenibilidad en España propone una batería de indicadores agrupados en 6 dimensiones para medir el grado de avance que tiene el desarrollo sostenible en una localidad. Estas dimensiones y sus indicadores son:
  1. La sostenibilidad de la dinámica territorial del municipio: balance de carbono local, proporción de suelo no urbanizable, densidad urbana y ritmo de crecimiento urbanístico.
  2. La movilidad: vehículos por cada 1000 habitantes, distribución de los modos de transporte, viajes en transporte público por habitante.
  3. Las dinámicas sociales y la calidad de vida: crecimiento de la población y grado de desempleo por género.
  4. La estructura económica local: diversidad de las actividades económicas y sostenibilidad de las actividades económicas.
  5. El metabolismo urbano: consumo de energía, de gas y agua; generación de residuos y recogida selectiva.
  6. La gestión institucional: presupuesto municipal por habitante, porcentaje de abstención en las elecciones locales y acciones emblemáticas en favor del desarrollo sostenible.


En 2012, en Rio de Janeiro, los gobiernos volverán a reunirse con la finalidad de mostrar su voluntad política para moverse hacia un camino más sostenible. La reunión tendrá lugar veinte años después de la última Cumbre de la Tierra de Río y diez años después de la Cumbre Mundial de Johannesburgo sobre Desarrollo Sostenible. El año que viene tendremos la oportunidad de observar los avances que han tenido los países y específicamente sus ciudades en la consecución de los objetivos de la Agenda 21. Pero también será una gran oportunidad para saber cuáles han sido los países que han incumplido con este impostergable compromiso.

En el caso de Venezuela, los esfuerzos han sido nulos. Luego de casi 20 años de haber el país suscrito la Carta de la Tierra nos encontramos con que la Agenda 21 ha sido poca difundida. Los gobiernos tanto regionales como locales no han impulsado la puesta en marcha de políticas, programas o proyectos alineados con los principios trazados en la Agenda 21.

El reto de introducir a Venezuela por la senda del Desarrollo Sostenible pasa porque desde el nivel local podamos trabajar la Agenda 21 con las organizaciones civiles, el poder popular, la escuela y en general los ciudadanos organizados. Hacerlo se convierte en el mayor imperativo que tenemos como compromiso con las generaciones futuras.

Por Alexis Romero H.
http://alexisromeroh.blogspot.com/2010/11/10-razones-para-decir-no-la-energia.html
Politólogo, Magister en Economía Social y Desarrollo Comunitario.

No hay comentarios:

Publicar un comentario