En nuestro país la ley establece un incentivo en la generación de energías renovables hasta un 5% de la generación total de energía eléctrica. Durante el primer trimestre de este año se supero esa meta, dejando sin incentivos a los nuevos proyectos de generación que se están llevando a cabo, especialmente en generación de energía eólica y pequeñas hidroeléctricas.
Se estima que este freno en las inversiones se acerca a los $3.500 millones de dólares, donde al menos $2.500 corresponden a proyectos de energía eólicas y $1.000 a mini hidroeléctricas. Este fomento que proporciona el estado a la generación de ERNC se comenzó a implementar en enero de este año, con la idea de hacer más competitivas las empresas de energías verdes frente a la generación tradicional.
Según el ministro de energía Ricardo Raineri, esto no es un freno a los proyectos futuros, ya que estos proyectos son rentables incluso sin el incentivo del estado, por lo que estas inversiones siempre se han contemplado sin considerar las medidas del estado.
Hoy la situación en nuestro país es de incertidumbre con respecto a las ERNC, y si bien cada vez son más rentables, aún no logran ser competitivas sin un apoyo del estado en cuanto a asegurar la compra de la energía verde por parte de las grandes compañías.
Carlos Jara
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